¿Qué es eso que algunos llaman el
toro-toro? ¿Es ese animal enorme y mastodóntico que le gusta a ciertos
aficionados considerados toristas, o por el contrario es ese animal serio y
armónico pero sin estridencias? ¿Qué es un toro bravo? ¿Es ese toro con genio que
para algunos no se debe dejar torear fácilmente y debe de ponerlo muy difícil a
los toreros o es ese animal con movilidad, raza, recorrido, repetición,
duración y que humilla incansablemente hasta el final de su lidia? ¿Qué es el
toro serio? ¿Aquel ancho de sienes con los pitones muy grandes
y astifinos o ese toro no exagerado de pitones y cornidelantero que asusta con
sólo verlo? ¿O quizás ese otro de mirada y expresión agresiva aunque esté mocho
de pitones? ¿Acaso sólo mata el toro grande, bravo y astifino? ¿Qué ganadero
tiene más mérito? ¿El que lidia doce o quince corridas de toros
al año y por estadística tiene más probabilidad de tener triunfos y pegar
petardos o el que lidia dos corridas y por lógica tiene menos probabilidades de
éxito y fracaso? ¿Acaso a ambos ganaderos no les cuesta dinero y mucho
sacrificio criar sus toros? ¿Quién es una figura del toreo? ¿Aquel que llena
una plaza de toros a su reclamo, cobra más que los demás toreros y mata las
ganaderías más comerciales
o de un aparente fácil éxito o ese otro torero que tarde tras tarde se enfrenta
a los toros más exigentes y difíciles de la cabaña brava, esos de ganaderías
consideradas duras o de encastes minoritarios? ¿Acaso cualquiera de esos dos
tipos de toreros no están cosidos a cornadas?
¿Qué toreo es mejor, el de llevar
la embestida o el de ponerse bonito y acompañar?
¿Acaso en uno u otro no se arriesga y lo que pasa por allí es tan sólo viento y
no un animal que en una décima de segundo puede arrancarte la cabeza de un
pitonazo? ¿Quiénes
son los mejores empresarios? ¿Aquellos que llevan muchas plazas
o los que llevan pocas? ¿Acaso unos y otros no arriesgan su dinero y pierden la
mayoría de las veces merced al altísimo coste de producción de un espectáculo
taurino? ¿Quién
es mejor apoderado? ¿El independiente que lucha con su torero
contra viento y marea o el ligado a una o varias casas empresariales? ¿Acaso
los unos y los otros no luchan por sus intereses y los de sus representados? ¿A quién hay
que considerar mejor aficionado? ¿A aquel que se considera muy
exigente y que nunca se contenta con nada de lo que pasa en el ruedo o a aquel
que tiene sentido común, sabe ver el toro y valora siempre al torero en función
del toro que tiene delante? ¿Por qué el criterio de un aficionado supuestamente
entendido tiene que ser más importante que el de un espectador que sabe lo
justo de toros pero que al igual que el otro ha pagado su entrada y tiene
derecho a opinar desde el respeto lo que le dé la gana? ¿Quién es
mejor que quién en este lío? ¿Quién lleva siempre la razón?
¿Quién o quienes se han parado alguna vez a preguntarse todas estas cosas de
las que la mayoría no tienen una única y verdadera respuesta?
Cada día dudo más de todo en este mundo del toro. Cada día me
pregunto más cosas y no soy capaz de responder ni a la mitad de todas las dudas
que me acechan. Y es que nunca hay una única respuesta a
cualquier pregunta y, por tanto, nunca hay una única opinión válida y verdadera
en cualquier aspecto de la vida y mucho menos en este mundo tan a veces confuso
y hostil como es el de la Tauromaquia. Y es que de lo único que no dudo es de que dudo y lo único que sé
es que no se nada. Y por el momento no veo atisbos de mejora…
No hay comentarios:
Publicar un comentario