viernes, 20 de noviembre de 2015

Una buena forma de soñar...

Qué forma de clavar la barbilla en el pecho. Qué forma de acompañar. Qué manera de sentir. Qué ritmo, qué compás. Qué cadencia. Qué manera de torear. Muy pocas veces en mi vida he visto torear tan bien como lo hizo Diego Urdiales el pasado domingo en la Méjico. Repito: muy pocas. Y es que no se puede torear más lento, más templado, mejor. El torero de Arnedo puso de manifiesto -para aquellos que aún lo dudan-, que el toreo es ante todo un arte. Cierto es que el toro de Bernaldo de Quirós fue excesivamente dulce. Muy noble y bondadoso. Sin demasiada casta. Si hubiera tenido un poco más de raza y trapío, la faena habría rozado la perfección. En eso estamos todos de acuerdo. Pero el toro de Méjico es el toro de Méjico. Aún así pensar: estamos hartos de ver tanta vulgaridad en el toreo. Ese toro al que Urdiales le armó el “gazpacho” no le habría valido a casi ningún torero. Porque si es difícil torear a un toro bravo, no es menos difícil emocionar y de qué manera con el toro medio, ese que traza la línea entre los toreros del montón que no dicen nada y los elegidos. Repito: con ese toro nos habrían emocionado tres o cuatro toreros sólo, y la mitad están ya retirados. Me emocionó y mucho la faena de Diego Urdiales a ese toro. Me dejó atónito. Y cuanto más la veo más me gusta. Diego es probablemente uno de los toreros que mejor torean en la actualidad, si no el mejor, al menos en ese tipo de toreo estético y artístico. Luego ya los gustos de cada aficionado hacen que a uno le emocione más un tipo de espectáculo que otro. Pero eso ya es otra cosa. A mí particularmente me ponen los pelos de punta tanto una faena de lucha titánica entre Rafaelillo y un miura como una de Morante o Urdiales ante un buen toro del tan denostado encaste mayoritario, siempre y cuando este no sea la tonta del bote y albergue ciertas dosis de bravura. Si no habéis visto la faena de Urdiales en la Méjico os animo a que lo hagáis. Es una buena forma de soñar...

No hay comentarios:

Publicar un comentario